Hace unos días se publicó la Guía de libros infantiles y juveniles IBBY México 2021, un listado de libros recomendados que cada año pública IBBY y que es, como su título lo deja ver, una guía, un faro, una ruta ya tradicional entre quienes nos dedicamos a acercar libros a más personas.
Para hacer posible esta guía, durante la primera mitad de cada año el Comité Lector de IBBY México nos reunimos a leer, releer, analizar y discutir los distintos libros para bebés, niñas, niños, jóvenes, docentes, bibliotecarios y mediadores que muy generosamente las editoriales hacen llegar a IBBY. Este año la presentación corre a cargo de Luis Téllez Tejeda, miembro del Comité Lector, gran conocedor y crítico de literatura infantil y juvenil; las coloridas ilustraciones, por su parte, corren a cargo de Natalia Gurovich, quien ha ilustrado libros maravillosos como Los rojos camaradas de Ana Romero, Unidad Lupita de Jaime Alfonso Sandoval y El maestro no ha venido de Marcela Arévalo, entre muchos otros.
Ésta es, hasta ahora, la Guía más peculiar de todas en las que he formado parte del Comité Lector, no peculiarmente difícil (aunque sí) o peculiarmente sencilla (que ninguna lo es), sino peculiarmente distinta, pero tan disfrutable como las otras. Quizá más retadora por el contexto en que la realizamos y la que más me ha hecho replantearme cómo observar a los libros, a la lectura y a los lectores precisamente por el contexto de encierro en el que la realizamos y en medio de una vorágine de webinars, charlas foros virtuales, videos de lectura en voz alta, reuniones propias de trabajo y un amplio etcétera de actividades desde la pantalla.
Como cada enero pusimos manos a la obra. En febrero, nuestras conversaciones previas a la revisión de libros comenzaban a teñirse de Covid-19. A principio de marzo nos planteamos continuar las reuniones de Comité desde la virtualidad. La primera que hicimos yo me encontraba aún trabajando físicamente en oficina, así que desde ahí seguí la reunión, y sin duda esta primera experiencia fue extraña. No es que nunca hubiera realizado una videosesión, ya con algunos años de distancia había participado en distintos webinars, pero sortear casi completamente una guía de libros desde la virtualidad es algo completamente distinto.
Pensábamos serían unas cuantas reuniones a distancia (al menos durante las primeras sesiones yo lo pensé), pero pronto nos dimos cuenta que esta guía estaría marcada en su totalidad por la virtualidad, la incertidumbre y la capacidad de adaptación también (aunque suene cursi) y, desde luego, las ganas de reunirte personalmente a analizar los libros, a pasarlos de mano en mano mientras alguien habla de ellos, a decir, “éste me lo quiero llevar también”, a saludar y abrazar al otro, a estar a la expectativa del análisis que realice sobre ese libro que quizá ya has leído. En lo personal extrañé mucho esas reuniones físicas, pero he de confesar que las reuniones virtuales que a ratos llegaron a ser cansadas, también fueron un oasis en medio de tanta actividad virtual, sí, aunque se lea contradictorio.
Lo dicho, es una guía de libros infantiles y juveniles muy peculiar por el contexto en la que la realizamos, contexto que a ratos parece no querer dar tregua. Pero también es una guía muy especial, porque está aquí a pesar de los pesares para, como cada año, ayudar a descubrir y poner luz sobre esos libros que quiza de otra manera no se encontrarían, porque los que la hacemos conocemos su importancia y la hacemos con un gran cariño, pero especialmente con un profundo respeto hacia los lectores a los que se dirige.
Es una guía que, desde lo personal y como ya lo mencioné, me hace repensar a los libros, la lectura, los lectores y mi función como bibliotecaria en un tiempo incierto donde las bibliotecas y los libros reiteran su papel como “lugar” de refugio.
Pues eso, esta Guía de libros infantiles y juveniles IBBY México 2021 es para descargarla, conocerla, adentrarse en sus páginas, acercarse a los libros que aquí aparecen.