Bajo la premisa de que en Estados Unidos hay menos del 5% de libros publicados que son traducciones, en el blog de FeedBooks publicaron un interesante, aunque bastante reducido, Mapa de traducción de Literatura Latinoamericana al inglés. Un mapa que además de interesante, me ha dejado con varias ideas dando vueltas, que si bien no son nuevas y se han abordado en otros espacios, no por ello no es válido volver a la reflexión.
Desde luego que los libros que aparecen en este mapa son sólo aquellos que, además de estar traducidos al inglés, están disponibles en FeedBooks; razón por la cual puede resultarnos un tanto escueta la selección. Aunque, sin duda, este mapa de literatura latinoamericana es un triste reflejo de lo poco que se consume nuestra literatura en un mercado tan grande e importante como los es Estados Unidos. Pero lo que es más importante, un país cuya población de migrantes latinos alcanza, según el informe del Pew Research Center en septiembre de 2017, la nada despreciable cifra de 57.5 millones, es decir, el 18% de la población de Estados Unidos; un país en el que también el español es el idioma más estudiado como segunda lengua, seguido por el francés y la Lengua de Señas Americana, esto último de acuerdo con datos de la Modern Language Association (MLA) en 2016.
Y si eso ocurre en literatura latinoamericana traducida al inglés, no hablemos de traducciones a otros idiomas distintos del inglés, por ejemplo, acá dos artículos que hablan sobre la literatura latinoamericana traducida al japonés o al chino. Traducciones que abarcan casi exclusivamente a clásicos de la literatura latinoamericaca como es el caso de Pablo Neruda.
Por cierto, como se menciona en el artículo del caso de la traducción de literatura latinoamericana al chino en las décadas de los 50, 60 y 70 del siglo pasado obedecía a objetivos políticos en los que se quería ejemplificar el poco valor estético de las obras literarias de los “pueblos políticamente débiles”. Afortunadamente la visión cambió en la década de los 80 cuando se tradujeron cerca de 130 obras donde ya podemos encontrar a autores como Gabriel García Márquez con Cien años de soledad y Mario Vargas Llosa con La ciudad y los perros.
Volviendo a la traducción literatura latinoamericana al inglés, de acuerdo con El País, en 2014 se tradujeron sólo 67 títulos. ¿Sesenta y siete de una producción de cuántos en ese año? Si mi lectura no estuvo mal sólo contemplaron los títulos de autores españoles, aunque si se incluyeran las obras de autores latinoamericanos, no estoy segura que esta cifra aumente considerablemente.
En fin, una cosa es la escasa traducción de literatura latinoamericana a otros idiomas, especialmente al inglés. Pero esto también nos da para reflexionar por qué en América Latina leemos tantas traducciones, qué nos hace tan receptivos a leer traducciones y por qué no ocurre lo mismo con nuestra literatura.
¿Alguna hipótesis al respecto?