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1 Comment

  1. Rosa María Quesada
    31 diciembre, 2020 @ 12:05

    Parece que es imposible escaparse de los problemas y dolores de cabeza, incluso en la ficción. No prometo leer estos libros próximamente, necesito un tranquilizante, un “soma”. El de la bibliotecaria lo amo, Gabriela Mistral es demasiado cursi para mí.
    Agradezco que compartas tus gustos. Cuando estómago para leer sobre migración y abandono leeré los que mencionas. Al de Melchor no creo llegar, no puedo con tanta violencia.

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