La biblioteca pública en México es un gran esqueleto al que hay que dotar de nervio y músculo… La primera función que cumplen es la de proporcionar un espacio público para millones de estudiantes de educación básica que en sus hogares no disponen de un lugar para estudiar. Esto es lo que, por el momento, han podido conseguir las bibliotecas públicas en México. Un espacio: mesas y sillas, un techo y paredes, una colección básica de documentos, un personal que cierra y abre a sus horas y que mantiene un orden en colecciones y público. Con un poco de suerte, una computadora, con un poco más de suerte, conectada a internet, y con mucha, pero que mucha suerte, conexión de banda ancha: 32.1% tiene conexión a internet y 22.6 % accesa mediante banda ancha.
Raúl Salaberria. Apuntes de un observador de las bibliotecas públicas de México
Una lectura recomendada en la que no puedo más que estar de acuerdo, a veces los números y los cacareados informes, aunque impresionantes, siguen siendo huecos cuando la realidad refleja una situación muy distinta. De nada nos sirve hablar de bibliotecas públicas por miles, si no cumplen su función porque el material es obsoleto o no resuelve las necesidades de la comunidad. De nada sirve hablar de una gran biblioteca pública en el centro del país, si otras bibliotecas públicas están en el abandono.
Esta biblioteca pertenece a la Red Estatal de Bibliotecas Públicas, conformada por 232 bibliotecas públicas en Zacatecas; la Biblioteca “Mauricio Magdaleno” es la más grande en todo el Estado y recibe su nombre en honor al zacatecano Mauricio Magdaleno Cardona (1906-1986), prolífico escritor de cuento, ensayo, teatro, guiones cinematográficos, etc. Gracias a él fue posible continuar la colección “Cuadernos de lectura popular” (donde publicó más de 200 títulos), iniciada por Jaime Torres Bodet con el título “Biblioteca Enciclopédica Popular”.
La biblioteca se fundó en 1986, cuenta con un acervo de 45,600 títulos distribuidos en las siguientes colecciones y áreas:
MÓDULO DE SERVICIOS DIGITALES
Equipado con computadoras para permitir el acceso de los usuarios a internet para investigar en cualquier temática de interés.
SALA PARA PERSONAS CON DISCAPACIDAD VISUAL
Se realizan actividades para el aprendizaje del sistema Btaille grados I y II(estenografía), manejo del ábaco y del Sistema Jaws (software para ciegos y débiles visuales).
SALA INFANTIL Y LUDOTECA
Aquí se llevan a cabo talleres de promoción lectora como El club de lectura y la Hora de la investigación.
Cuenta además con un acervo especial, conformado por literatura infantil, obras de consulta, revistas, material audiovisual y juegos didácticos, enfocado a niños entre 5 y 12 años.
SALA DE PROYECCIONES
Se proyecta cine de arte y comercial, cursos de inglés e introducción a la computación.
HEMEROTECA Y COLECCIÓN DE PUBLICACIONES PERIODICAS
La colección de publicaciones periódicas está conformada por revistas, anuarios e informes. Por su parte, la Hemeroteca cuenta con diarios antiguos que datan de 1879 (para el periódico local) y de 1849 (para el periódico de circulación nacional).
COLECCIÓN INEGI Y COLECCIÓN ZACATECAS
La Colección INEGI la conforman cerca de 800 ejemplares de censos y estadísticas del Estado realizadas por el INEGI.
La Colección Zacatecas está integrada por 600 ejemplares que hablan de la historia del estado.
MAPOTECA
Conformada por una colección de 1013 mapas de Zacatecas.
VIDEOTECA
Conformada por distintos materiales audiovisuales: películas en formato VHS, diapositivas, audiolibros, DVD, CD, Casetes y discos de acetato.
SALA GENERAL Y SALA DE CONSULTA
Compuesta por libros de filosofía, religión, ciencias sociales, lenguas, literatura y biografías.
La Sala de Consulta, por su parte, cuenta con un acervo dividido en:
Colección primaria: diccionarios, enciclopedias, directorios, atlas, almanaques y manuales.
Colección secundaria: índices y bibliografías.
SERVICIOS
Préstamo a domicilio
Préstamo en sala
Fomento al hábito de la lectura
Visitas guiadas
Cursos básicos de computación en línea
IntelAprender
Talleres para niños
Pintura en acuarela
Papiroflexia
Teatro en atril (manejo de guiñoles)
HORARIO DE ATENCIÓN:
Lunes a viernes 9-21 hrs
Sábados 10-15 hrs
Sin duda, una visita que disfruté mucho y en la que pude ver que las actividades de extensión bibliotecaria son las destacadas; además de las clases de danza, los talleres para niños y el taller de verano “Mis vacaciones en la biblioteca” (que se realiza en todas las bibliotecas públicas del país), llamó especialmente mi atención que se estuvieran proyectando los partidos del Mundial de Futbol al interior y la pequeña exposición de acervo relativo a este tema. Si bien, yo preferiría que los usuarios tuvieran acceso a redes sociales que les pueden ser de gran utilidad, no puedo negar que programar los partidos y mostrarles libros de futbol es una gran manera de acercar a los usuarios a la biblioteca.
Aprovecho también para agradecer al Sr. Oscar Martínez Ortíz, Jefe de Servicios por el gran tour, explicación, información y todas las facilidades para esta visita fotográfica.
Referencia:
Biblioteca Púbica Central Estatal Mauricio Magdaleno (Folleto de la Biblioteca)
RIVERA, S; CAMPECH, E. (2006). Centenario del natalicio de Mauricio Magdaleno (1906-2006). En: El bibliotecario, 5(59), pp. 8-11.
Este Manifiesto proclama la fe de la UNESCO en la biblioteca pública como una fuerza viva para la educación, la cultura y la información y como un agente esencial para el fomento de la paz y del bienestar espiritual a través del pensamiento de hombres y mujeres.
Manifiesto IFLA/UNESCO sobre la biblioteca pública
En el post Bibliotecas públicas ¿censura o democracia? publicado ayer en Deakialli Documental, donde se expone la censura al acceso a diversas páginas y sitios de internet (entre las que se encuentran youtube, spotify y aquellas que se consideran con contenido pornográfico) que las Bibliotecas Públicas de la Comunidad de Madrid están ejerciendo, se señala además que lo verdaderamente grave no se queda en la restricción por parte de las autoridades a dichas páginas, sino la visión y apoyo de los usuarios a esta actitud, considerando a la biblioteca como un lugar de estudios y no de pasatiempo.
¿En dónde, de qué manera o quién impulsó tan exitosamente esta idea equivocada de la biblioteca pública? El post me lleva a confirmar el porqué los usuarios prefieren otros sitios para estudiar, leer o recrearse, que es precisamente de lo que les hablaba la semana pasada en Las Bibliotecas vs los Starbucks. Sin embargo, creo que este asunto va más allá de las comodidades o “intelectualidades” con las que equipamos a nuestras bibliotecas para acercarlas o alejarlas de nuestros usuarios. Aunque bien se menciona en Deakialli Documental que un gran sector del gremio bibliotecario luchamos día con día para quitar este halo de inaccesibilidad y solemnidad a las bibliotecas; es evidente que no estamos enviando del todo bien el mensaje pues, por un lado, dentro del gremio hay quienes aún entienden a la biblioteca sólo como un espacio de estudio e investigación, por ende, de silencio y solemnidad; y por otro lado, de parte del usuario, existe esta idea incrustada de que así debe ser.
Como siempre lo he mencionado, no es responsabilidad del usuario saber qué es, cómo funciona y cómo se utilizan los recursos de las bibliotecas, en definitiva, el primer paso debemos darlo nosotros. Así que, no es su culpa pensar que así debe ser y que así deben funcionar las bibliotecas. Francamente y aunque me disguste bastante, no culpo a los usuarios por los comentarios e ideas vertidas en el artículo original; a mi me queda claro que aún no hemos encontrado la forma de transmitir la esencia real de la biblioteca pública; aunque muchos de nosotros nos esforcemos por hacerlo es evidente que en el gremio estamos utilizando distintos lenguajes.
Entonces cabe la pregunta ¿hasta donde llega nuestra función? estoy convencida que la nuestra no es una labor de censura, no está en nuestra responsabilidad decidir que sí o que no se va a leer en las bibliotecas, ni cómo debe el usuario utilizar los recursos; sino ser garantes de que éste llegue finalmente a su objetivo, sea con fines recreativos, de investigación o de estudio. Como se señala en el manifiesto IFLA/UNESCO sobre la biblioteca pública (1994), entre las misiones de la biblioteca pública está:
crear y consolidar los hábitos de lectura en los niños desde los primeros años;
prestar apoyo a la educación, tanto individual como autodidacta, así como a la educación formal en todos los niveles;
brindar posibilidades para el desarrollo personal creativo;
estimular la imaginación y creatividad de niños y jóvenes;
fomentar el conocimiento del patrimonio cultural, la valoración de les artes, de los logros e innovaciones científicos;
facilitar el acceso a las expresiones culturales de todas las manifestaciones artísticas;
fomentar el diálogo intercultural y favorecer la diversidad cultural;
prestar apoyo a la tradición oral;
garantizar a los ciudadanos el acceso a todo tipo de información de la comunidad;
prestar servicios adecuados de información a empresas, asociaciones y agrupaciones de ámbito local;
facilitar el progreso en el uso de la información y su manejo a través de medios informáticos;
prestar apoyo y participar en programas y actividades de alfabetización para todos los grupos de edad y, de ser necesario, iniciarlos.
Me quedo, entonces con la reflexión que hace Catuxa en su post y que nos debería dar para replantear nuestra labor social:
Fernando Álvarez del Castillo, quien se encuentra a cargo de la Dirección General de Bibliotecas, anunció el 4 de febrero pasado el Programa de Bibliotecas Modelo:
Lo que tendrán las bibliotecas modelo serán unas ludotecas, una sala juvenil, multimedia, una más de invidentes, un modulo de servicios digitales, así como mobiliario moderno y confortable.
Álvarez del Castillo
Para lograr lo anterior, se reforzarán 20 bibliotecas en el país con 3000 volúmenes actualizados, se instalarán recursos digitales y se elaborará también una guía básica de instalación y funcionamiento integral de este tipo de bibliotecas. Por otro lado, se pretende actualizar e innovar los servicios disponibles en las bibliotecas públicas mexicanas, así como poner al alcance del público información histórica relacionada con el Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución Mexicana, es decir, dotarán de 880 colecciones especializadas en el tema a 880 bibliotecas.
En materia de servicios digitales, el Programa Bibliotecas Modelo pretende crear una “biblioteca digital en línea de recursos multimedia”, así como digitalizar material bibliográfico e impulsar una plataforma de consulta de recursos que permita el acceso a libros digitales.
El Programa Bibliotecas Modelo busca también concientizar a los usuarios del valor histórico del recinto donde ésta se encuentra. así como “consolidar”(?) la Biblioteca Vasconcelos como centro cultural (no pregunten, a estas alturas ya debería estar más que consolidada) con talleres como hasta ahora se ha venido haciendo.
De entrada, suena un programa interesante y con un buen propósito, aunque algunas actividades y objetivos siguen sonando un poco faltos de análisis; además, con la historia ya conocida de los programas culturales de este país…
En fin, de momento prefiero ahorrarme los comentarios y/o predicciones; creo que será mejor ver cómo va funcionando este programa, esperar los primeros informes del mismo y saber si lograron fortalecer realmente a nuestras bibliotecas públicas para que funcionen como lo que deberían ser: bibliotecas públicas al servicio de la comunidad. Sólo agrego que mucha tarea pendiente durante los próximos meses para la Dirección General de Bibliotecas.
El día de hoy se llevó a cabo una conversación vía web chat sobre el “Programa de Innovación en Bibliotecas Públicas (PLIP)” con el objetivo de que Pilar Pacheco y Enzo Abbagliati nos dieran a conocer dicho programa:
El Programa de Innovación en Bibliotecas Públicas promueve el desarrollo de servicios innovadores para mejorar la vida de las personas a través del uso de tecnologías. Este programa de donaciones de tres años ayudará a bibliotecas en países en desarrollo o países en transición convertirse en centros de la vida de sus comunidades.
El propósito del PLIP es apoyar a las bibliotecas públicas en los proyectos que hagan uso de las tecnologías para crear servicios innovadores en pro de las necesidades de su comunidad. En esta primera etapa se aceptarán 10 propuestas y para ello, los responsables de bibliotecas tendrán hasta el 28 de febrero de 2010 (Roma/hora de Italia) para mandar su solicitud a plip@eifl.net o bien, por correo tradicional .
En la primera ronda de donaciones participarán aquellos países en los que eIFL o la Fundación Bill & Melinda Gates tienen presencia, aquí menciono sólo los países de América Latina que participarán en la primera ronda: Argentina, Chile, Colombia, Guatemala y México.
Los proyectos seleccionados se anunciarán a finales del mes de marzo y tendrán que ser puestos en práctica en un plazo de 12 meses.
La Biblioteca Antonio Torres Gómez – Quinehuayan fue fundada en 1996, en la Ciudad de León Guanajuato, gracias al apoyo de la Asociación “Promoción y Difusión Cultural de León A.C.” en honor al Lic. Antonio Torres Gómez, quién fue Presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado.
La biblioteca ofrece los siguientes servicios:
Acervo Bibliográfico
Mapoteca
Hemeroteca
Videoteca
Sala de Lectura
Talleres infantiles, para jóvenes y adultos
Dirección:
Madero No. 538 Esquina Juan Valle
Col. Centro
León, Gto. C.P. 37000
Tel. (477) 771-4736
Fax. (477) 771-4736
Horarios:
Martes a viernes 9:00-14:00 y 17:00-20:00
Sábado 9:00-14:00 y 17:00-20:00
Domingo 10:00-14:00
En el viaje más reciente, tuve la oportunidad de conocer la Biblioteca Pública Federal Gertrudis Bocanegra, en Patzcuaro, Michoacán. La biblioteca, inaugurada en 1938, se localiza en lo que antiguamente fue el Convento de San Agustín, fundado en 1576. Uno de sus principales atractivos es el mural pintado por Juan O’Gorman donde resumió la historia de Michoacán desde la época prehispánica hasta la Revolución Méxicana.
La visita me dejó con un buen sabor de boca; sin embargo, como cualquier biblioteca pública en nuestro país está llena de matices que mucho distan de los informes oficiales; afortunadamente, creo que en el balance general hay muchas cosas positivas que rescatar, además hay que señalar que se está haciendo un gran trabajo al interior para integrar la biblioteca a la vida de los residentes de Patzcuaro.
Entre los aspectos positivos y que me causaron grata sorpresa estuvo el encontrarla con una cantidad considerable de usuarios leyendo, estudiando, buscando información en internet o realizando tareas escolares. La mayoría de los usuarios eran niños de educación primaria y secundaria; aunque también se encontraban adultos y uno que otro turista que la visita por encontrarse en un edificio de carácter histórico y por el famoso mural de Juan O’Gorman.
Asimismo, la Sra. Gloria Blancas, encargada de la biblioteca y a quién agradezco la atención, autorización, me compartió vía mail algunas informaciones que considero pertinente mencionar en este post para tener una idea más general de las distintas actividades que se llevan a cabo:
La biblioteca está completamente dedicada al quehacer cultural de la ciudad, para ello se llevan a cabo actividades y talleres enfocados en conservar las tradiciones y costumbres de Patzcuaro.
Las fechas recomendadas para la visita son en los meses de julio, agosto (que coincide con el programa “Mis Vacaciones en la Biblioteca”), octubre, noviembre (especialmente durante las festividades de día de muertos), diciembre y semana santa.
Un día a la semana se destina a la atención del público adulto.
Actualmente se encuentran en proceso de digitalización de documentos para integrarlos en su archivo en línea.
Por otra parte, fue una pena ver que parte del acervo es obsoleto, cosa que no es exclusiva de esta biblioteca, sino que es una constante en nuestras bibliotecas públicas. Digo que es una pena, porque esto me ha confirmado la ya vieja discusión en este blog que tiene que ver con la enorme cantidad de recursos destinados sólo a una biblioteca pública, cuando muchas de las bibliotecas públicas en otros Estados tienen un acervo obsoleto en el mejor de los casos.
No dudo y ya también lo he mencionado en este espacio, que se está haciendo un gran trabajo en la Biblioteca Vasconcelos; sin embargo, nadie me quita de la cabeza que esta biblioteca no llega a todos los usuarios y todos los rincones del país; y que el presupuesto bien pudo utilizarse para fortalecer y dotar a otras bibliotecas (como es el caso de la Biblioteca Gertrudis Bocanegra) del acervo y equipo que permita explotarlas al máximo como el recurso de información para el que fueron creadas.
Una noticia buena entre tanta polémica y “dimes y diretes”, no le cae mal a nadie (creo) y mucho menos a la Biblioteca Vasconcelos que… bueno, para qué hablar de lo malo, cuando quizá valdría la pena rescatar lo positivo.
Y dentro de esto positivo, encontramos el informe de actividades de mayo-junio que Fernando Álvarez del Castillo, director de la biblioteca, acaba de presentar, donde se anuncia que el número de usuarios se incrementó en estos meses pasados a más de 91,000 visitantes, además de que se extendieron más de 3000 credenciales y se realizaron cerca de 46,000 préstamos a domicilio.
No me lo tomen a mal, pero yo la vi bastante solitaria el día que fui a realizar las fotografías, espero todo se haya debido al horario y día en que asistí. He de reconocer que me da mucho gusto encontrar este tipo de notas que nos hablan de cómo va avanzando la Vasconcelos en materia de servicios –a pesar de su fallido comienzo– especialmente aquellos destinados a la promoción lectora, como los talleres de verano, que por cierto ya comenzaron.
Entonces, ahora defiendo la idea de: ya que la tenemos, aprovechemos los servicios y explotémosla al máximo, acudamos a buscar información que necesitemos, a realizar alguna tarea escolar o tan sólo vayamos a leer un rato en sus salas de lectura que, cabe mencionarlo, son cómodas y luminosas. Que sirvan de algo, que sirvan de mucho, los más de $800 millones invertidos en este espacio.