Como cada 23 de abril nos damos cita para celebrar el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor, que a su vez coincide con otras fechas importantes como es el Día Mundial del Idioma Español y el Día del Bibliotecólogo en Colombia –¡Felicidades colegas de aquel lado del continente!–, y con un día de diferencia también se celebra el Día de la Tierra (22 de diciembre); así que, como verán hay razones de sobra para festejar en grande. Como ya es costumbre, en el blog la celebración viene de la mano de recomendaciones de lectura, en esta ocasión de sólo un libro que, definitivamente merece más de una lectura y que deja con una impresionante cantidad de anotaciones, subrayados y marcadores:
Shady characters: the secret life of punctuation, symbols & other typographical marks de Keith Houston: un libro simple y sencillamente iluminador en el que, con una lectura bastante ligera conoceremos el origen del asterisco (*), del octothorpe, mejor conocido como gato por estas latitudes (#) y que ha devenido en el famoso hashtag tan usado y maltrecho en twitter, la coma (,), los puntos (. :), los confusos guiones (medios -, largos –), la diagonal (/), el olvidado pilcrow (¶) que tiene siglos de existencia y al que ahora sólo vemos a través de procesadores de textos, los párrafos, el poco exitoso interrobang (⸘‽) que en la primera mitad del siglo pasado pretendió salir a la luz como una mezcla de interrogación y exclamación, el arroba (@) tan usado en estas fechas y que, a pesar de que muchos crean que es reciente (yo incluida hasta que leí este libro), ya se usaba en el comercio hace siglos; y tantos otros signos que manejamos en nuestros escritos diarios en twitter, facebook, correo electrónico y que damos por hechos sin imaginar el largo camino que han recorrido hasta nuestros golpes de teclado.
Y antes de terminar, otra buena razón para celebrar es que, como pocas veces los usuarios de twitter dieron paso a TT (trending topics) un poco más amables con motivo de este día. Ya está, a celebrar.