El día de ayer se publicó el Módulo sobre lectura MOLEC 2021, una encuesta que desde 2016 busca generar información estadística sobre el comportamiento lector de las y los mexicanos mayores de 18 años. Los resultados que comprenden el periodo del 2020 se deben analizar en un contexto muy complejo derivado de la pandemia por Covid-19.
En este post me quiero detener en aquellos resultados que llamaron especialmente mi atención, pero antes les comento algunos aspectos generales:
- El Módulo sobre Lectura Molec 2021 fue levantado durante los primeros 20 días del mes de febrero de 2021.
- Considera materiales de lectura a libros (impresos y digitales), revistas, periódicos, historietas y páginas de Internet, foros o blogs.
- De 2016 al 2021 la población lectora disminuyó un 9.2%, aunque fue mayor el número de libros leídos, 3.7 ejemplares en 2021, frente a los 3.6 leídos en 2016.
- El principal motivo para leer es el entretenimiento (42.6%).
- Hay más mujeres lectoras en todos los formatos, que hombres lectores.
Ahora sí, lo que más llamó mi atención:
Módulo sobre Lectura MOLEC 2021: ¿qué pasó con las bibliotecas?
En cuanto al acceso a los materiales de lectura y espacios destinados a la lectura, es preocupante que las bibliotecas no figuren, y es preocupante precisamente porque son los espacios donde prima el acceso libre y gratuito a distintos materiales de lectura. En el 2020 el acceso a través de las bibliotecas fue del 10.4%, mientras que en 2021 descendió hasta el 1.7%
Sin embargo, como lo mencioné en un principio, estas encuestas deben revisarse con lupa, especialmente en un contexto de pandemia por Covid-19. Las bibliotecas públicas, por ejemplo, permanecieron cerradas gran parte del 2020 y, debido a los periodos de cuarentena de los libros prestados, así como a la inexistencia de una plataforma de préstamo digital, no fue posible que la gente accediera a los distintos materiales de lectura (impresos o digitales) en estos espacios.
Quizá el 2020 y lo que llevamos del 2021 se ha hecho más evidente la importancia de una plataforma de préstamo digital como lo fue Digitalee. Dar acceso cuando no se puede abrir y no hay posibilidad de prestar materiales ha representado todo un reto que las y los bibliotecarios hemos tenido que ir aprendiendo a sortear. Algunos lo han resuelto mejor que otros, pero ha quedado un gran aprendizaje: las bibliotecas son espacios esenciales que deben estar abiertas, a pesar de estar en un contexto donde no se puede abrir.
Los audiolibros: grandes ausentes del Molec 2021
El Módulo sobre Lectura Molec) 2021 deja fuera al audiolibro y al podcast. Esto es un gran error pues, es un formato que que está viviendo desde hace varios años un resurgimiento y visibilidad importante. Aunque se pueda pensar que en México no existen lectores de este formato, de acuerdo con la Segunda Encuesta Nacional sobre Consumo Digital y Lectura entre Jóvenes Mexicanos publicada por IBBY México en 2019, el 16% de los encuestados consumen audiolibro.
Quizá el 16% parezca muy modesto, pero se debe tomar muy seriamente, no es gratuito que plataformas internacionales como Storytel estén desde 2018 en México.
Otros ausentes: las plataformas de suscripción
El libro digital es un formato con un incremento constante. En 2016 era del 6.8%, mientras que en el 2021 llegó hasta el 21.5%. El mayor crecimiento se detectó precisamente en 2020 pues casi duplicó al porcentaje de lectores en este formato que existía en 2019 (12.3%).
Lo anterior confirma otros estudios similares como el Informe Anual del Libro Digital 2020 de Libranda del que ya les platicaba en Leer en Pantalla. Este sorprendente incremento de lectores de libros digitales durante el 2020 puede y debe entenderse también en un contexto de pandemia donde el encierro, la falta de acceso a bibliotecas y librerías físicas y el esfuerzo de muchas editoriales y librerías por poner sus contenidos accesibles –primero de forma gratuita y luego en venta en línea–, además de las plataformas internacionales ya existentes, lo hicieron posible.
Es curioso, sin embargo, que en el Módulo sobre Lectura Molec 2021 queden fuera las plataformas de suscripción como puntos de acceso a los libros, especialmente cuando México es el segundo mercado de libro digital en lengua española gracias a estas.
¿Por qué no leen “los que no leen”?
No deja de ser interesante la última parte del Módulo sobre Lectura Molec 2021 destinado a los “no lectores” y las razones por las cuales no leen. Siempre he dicho que todas las encuestas relacionadas con prácticas de lectura tienen que encontrar la forma de replantear lo que se considera lectura, pues en el imaginario de los encuestados está siempre la idea de que lectura equivale exclusivamente a leer libros.
Casi la mitad de los “no lectores” (y discúlpenme que insista con las comillas) declaró no leer por falta de tiempo; 25.4% por falta de interés, 16.5% por preferencia para realizar otras actividades, 11.6% por problemas de salud, 2.1% por falta de dinero.
Qué pasaría si en lugar de preguntar “¿Cuál es el motivo principal por el que usted no lee los materiales de lectura antes mencionados?” (reactivo 32 del Molec) preguntaran “¿A qué destina su tiempo libre? ¿qué contenidos consume? ¿cuáles son sus actividades de ocio o entretenimiento?” Quizá las respuestas nos revelarían a más lectores de los que se encuentran en estas encuestas… o quizá no.
Conclusiones
Como siempre lo menciono, esta encuesta, como cualquier otro estudio sobre las prácticas de lectura debe leerse entre líneas y en ocasiones generan más preguntas que las respuestas que nos dan. Lo anterior no es necesariamente malo, pero sí hace visible la importancia de ampliar el concepto de lectura, de materiales de lectura y de lectores.
Por otro lado, los datos del actual Molec deben analizarse en un contexto extraordinario que no precisamente revela una tendencia en relación con años anteriores, pero sí visibiliza necesidades a las que ya no podemos darle largas como en otros años, por ejemplo, incluir al audiolibro, la importancia de las bibliotecas, las plataformas de suscripción, etc.
Resultará muy interesante analizar los resultados que tengamos en años posteriores, cuando estemos en un contexto de “nueva normalidad”.
